sábado, 27 de agosto de 2011

memorias de un angel prologo

Pese a lo irreal que pueda parecer ya que lo publico ahora, pero este prologo iría inmediatamente antes del primer capitulo, solo que lo escribí al final y por eso va el ultimo. espero que hayais disfrutado de memorias, desde aquí quiero dedicarlo en primer lugar a mi mujer Fátima a la cual amo con toda mi alma y que inspiro este amor inmortal a través de los siglos y a mi hijo Eric, sin ellos jamas habría publicado nada, y por supuesto a cada uno de  los que habéis leído los capitulo, sin vosotros no habría historia, sin más os dejo este prologo y os anuncio que en breve comenzare a publicar la segunda parte:
Cronica de un Arcangel.


PD: Si os ha gustado podéis hacerla realidad, podéis convertirla en papel si me votáis en :


http://www.bookad.co/profiles/blogs/memorias-de-un-ngel






Café de chinitas, en una céntrica calle de Madrid en una calurosa tarde de agosto. Dos individuos trajeados sentados frente a frente ajenos al ajetreo de la ciudad y al rumor incesante del gentío del café. Uno con traje de seda negro y camisa negra, solo una corbata de un tono agrisado saca algo de color a un conjunto totalmente oscuro y apagado, de cabello rubio largo y ojos grises y fríos. Frente a él, con traje de lino cubano blanco un hombre delgado pero de cierta altura pese a estar sentado, de nariz aguileña y pelo cano.
Las tazas de café aun humeante parecen escoltar a estos dos individuos que se miran y escrutan por minutos sin decirse nada como si el tiempo no pasara por ellos, como si de algún modo siempre hubieran estado ahí, atemporales.
De repente el individuo del traje blanco se adelanta y habla:
- ¿Bueno entonces que es lo que vamos a hacer?
- ¿A qué te refieres viejo amigo?
- Creo que ya sabes de que hablo, ha pasado demasiado tiempo sin una purga y deberíamos hacer algo al respecto.
- Sabes que la última no salió como debía de haberlo hecho.
- De eso hace ya diez años y no tuvimos la culpa hicimos todo de nuestra parte pero fallaron algunos cabos y por eso no estallo la tercera guerra…pero esta vez hemos pensado algo distinto, algo que no dependa tanto de la voluntad humana.
- ¿Te refieres a una purga tipo la peste?
- Algo así, pero más discreto y mucho menos sucio.
- Tenéis algo preparado, ¿algo de origen biológico?
- Se podría decir que si pero aun no tenemos la pieza inicial.
- ¿Te refieres a él? ¿Vais a traerlo de nuevo?
- Sí siempre que mantengáis encerrado al padre y no permitáis que ninguno de los vuestros se salga del camino trazado y se interponga en nuestros planes.
- Tranquilo, el padre esta donde no sabrá nada y en cuanto a nuestra gente, la mayoría estaría de acuerdo y de la minoría restante me encargo yo.
Ambos echan un sorbo al café aun caliente y encienden un cigarro. Varios segundos después una camarera de mediana edad y ojeras de no tener una vida agradable les pide que apaguen el cigarro ya que por ley se prohíbe fumar en recintos cerrados. Estos mirándola de arriba abajo le dicen algo.
- Claro señorita, esto mata sabe...y en estos días extraños hay que mantenerse sano y en forma ¿verdad?
La mujer contrariada se aleja con la sensación de que los tipos raros de la mesa trece no son buenos.

Volviéndose de nuevo el uno para el otro vuelven a retomar la conversación.
- Entonces Azarel ¿Estáis dispuestos a traerlo de nuevo entre nosotros? ¿Tenéis ya los trece sellos?
- Tenemos nueve localizados y tres en camino pero se nos resiste uno en particular, una petición precisa del primero. Quizás podríais ayudarnos.
- Tú dirás como podríamos hacerlo.
Sacando una foto del maletín negro, el hombre de blanco que responde al nombre de Azarel la desliza suavemente boca arriba por la mesa pasándosela a su acompañante. Éste la mira por encima reconociendo al individuo de la misma.
- Para que lo quieres a él, no es uno de nuestros hombres importantes, solo hace pequeñas misiones de rigor, nunca le hemos dado nada lo suficientemente importante para que os interese.
- Estas muy equivocado, nos interesa porque él será capaz de sacar a la luz el décimo tercer sello, el hará que la sangre derramada venga a nosotros, por eso y por motivos que no vienen al caso es importante para nosotros.
- Esta bien pondré a Connor a trabajar si es lo que queréis pero no sé de qué os puede servir, él es de rango menor.
- No es su rango lo que nos interesa. Aparte…

Sacando una nueva foto que desliza nuevamente por encima de la mesa le enseña esta vez la foto de una chica morena de pelo desigual y ojos carmesí.
- Y a ella quiero que la mantengas al margen de todo, no quiero que husmee ni asome sus insidiosas narices por aquí, ya nos ha hundido en demasiadas ocasiones.
- Ella no será ningún problema, yo me encargo de controlarla.
- No te equivoques con ella, es muy vieja y por nuestra experiencia si algo hemos aprendido es que es incontrolable.
- No será un problema te lo aseguro viejo amigo.
- Que así sea…cuando el primero este entre nosotros soltaremos nuestra plaga y una nueva purga caerá sobre los desdichados monos.
Azarel se levanta para irse no sin antes estrechar la mano de su acompañante en el café de chinitas.
- Nos vemos Miguel.
- Espero que no Azarel, espero que no.
Ambos se levantan y abandonan el café, cada uno toma un camino distinto.

2 comentarios:

  1. ohhh ya lo tenian todo planeado.....,como siempre impresionante me ha encantado lo malo es ahora tener q esperar a la segunda parte

    ResponderEliminar